martes, diciembre 02, 2008

LA FALSA MEMORIA


SÓLO EL TIEMPO…


Nuestros cuerpos
Penden de un
Hilo
Todo nos acecha
Y nos pervierte
Todo
Es lo mismo que
Mirar la hoja vacía
El alma vacía

Signos solamente
Frases sin piel ni
Corbata

¿Hay algo peor que el
Silencio de morir entre
Verbos y palabras?


El olvido
El ir caminado
Por algún lado y
De pronto
Entender
Que nadie camina
O mirar los espejos
Y no hallar
Absolutamente nada
Sólo la noche


PASOS EN FALSO

……………………….
Yo sé que contigo
No empezó el mundo
Pero estoy seguro
Que se terminará
Si un mal día
Me faltas


…………………......
La mirada de otro hombre
Que se posa en tus ojos
Da vuelta la página
Y olvida que tiene rostro
Se pierde
Entre cada palabra
Y se pone de pie

Y cae
Apenas un paso da


…………………………..
Cuerpo disoluto
Que en la noche se convierte
En mar
Marasmo de la mirada
Quietud entre ola y piedra
Ven a abrir la noche
Y quédate en cada esquina
Con tus alas señalando
El día

No me dejes en paz

Después de muerto
Es posible
Que continúe haciendo
Tu nombre
En este papel


……………………………
Si no eres la mujer que escondes
En tus ojos
Y sólo eres la mañana que me
Absorbe a cada paso
Deja de mirarme y quizá
Lograré no verte más





ILIA

Mis manos
Marcadas por tu boca
Yacen en este rincón
El otoño parece
Invierno que no espera
Verano que se hace lágrima
Sudor monótono de los días
Y los brazos
Contigo
El mundo es sólo palabra
Piel de sol
Torrente de fuego
Tú caminas las calles
Entras al mar
Brotas de la tierra
Como hierba fresca
Te ubicas en la noche
Y eres el trueno que se esconde
Entre tanta espuma
De tus senos nace la lluvia
El silencio insólito
Y hasta la propia muerte
Por eso me acerco con cuidado
Tratando de no despertar
Tus labios
Me acerco y comprendo
Por qué la vida es a veces
Como una catarata de sombras
En voz baja repito tus nombres
Mueves el tiempo
Con tus dedos
Matas la tarde
Y me dejas sin un rastro
De fuerza
Todo se vuelve hoja
Camino que nadie anda
Tu piel es el racimo de soledad
Que me ata al insomnio
Contigo no existe paz
Estamos en guerra
Es posible que mañana la muerte
Espere por mí y desaparezca
O simplemente te quedes desnuda
Entre la gente
Hasta perder la voz
Y convertida en ave
Huyas a otro espacio
Sin pensar en mí


viernes, noviembre 28, 2008

PROEMIOS


ELEGÍA A UN CADÁVER


No hay nada más que decir
Ha llegado la noche
Mientras huías
Gaviota de espuma
Serpiente y montaña
La ciudad parece la sombra
Que arrastra mis pasos
El cementerio árido en donde
Descansa mi cuerpo sobre
La tumba de otro

Eres linda pero hieres
Tierra dormida
Raíz y semilla
Mi corazón tiene años
Agonías tristes de sueños
Y esperanzas falsas
Mi corazón a veces canta
Pero a veces muere
Pendiente de mar
Desvarío y palabra

Y es posible que el silencio
Sea la única manera de
Decirlo todo
De entender que la lluvia jamás
Borrará el dolor que mancha
Mis días

Grito de sol
Soledad y urgencia
Tu cuerpo desaparece entre
El follaje del tiempo
Me ata al peor instante
A la última noche en tus ojos
Y camino sin fe por el zaguán
De casas de algún pasado
Por tu boca que ya no tengo
Por tu voz
Que cayó entre la niebla
Y desata ríos inmundos

Paloma de mar
Arena y desgracia
Llega al vacío mi presión
Mi pulso
Tu desamor florido

Entonces me tiendo ante
El fin
Y me desnudo



ELEGÍA SOBRE PAPELES


Todo lo que miro
Es real apenas
Desde tus manos
Tú caminas
Mueves tus piernas
Al inicio de cada día
Te desnudas
Y aquietas el movimiento
De la tarde que pasa
Si no eres mar
Eres el cuerpo que se
Hace agua
La tormenta que baña
El maíz y los pájaros
Das de beber al sediento
Al esclavo le sueltas
Las amarras
Y es tan triste verte
En un abrazo
Cuando se disipa la niebla
Es tan triste saber
Que habrá mañanas
En que la muerte será
Como sacarte de la memoria…
Y la luz que dibuja
El último recodo de playa
La arena que estalla
Sobre tanta piedra
Todo es sólo una mínima parte
De lo que tú significas
Pan en soledad
Hora vacía
Que hiere la piel
Contorno y pasillo
Abre tus manos
Y descubre destinos
El mío es verte
Tocarte de memoria
Como a esta página
Caminar sin ti
Nombrarte hasta
Quedar sin nada
Aceptar mi locura
El silencio de tu voz
Que niega el tedio y
Se hace magnolia
Abre las manos
Y deja a un lado el balcón
El temor de percibir
Tu rostro acaecido
No hay nadie
Después de ti
Tú eres comienzo
Y lejanía
El ancla que detiene
Mis pasos
Eternidad y diluvio
Ausencia que mata
Presencia en donde
Las palabras son sangre
Sangre que agita
Mi corazón
Preludio de guerra
Serenidad de saber fingir
Que aún fluyes con
El pudor de siempre:
Y el viento que ruge
Devorando incendios
La escalinata que me lleva
A tu vientre perpetuo
El clamor de las horas
Cuando el reloj se quiebra
Todo es tan poco
Para lograr alcanzar
La mínima calma
Para nombrarte siquiera
Entre la grieta insondable
De tú no presencia
Y el azul insípido de
Ese cielo en el cual te pierdes
Eres más que la indiferencia
Más que la orilla en donde
Las olas ahogan su curso
Más que el volcán que arrasa
Y pervierte los bosques
Insensible a veces
Pero agua que riega la tierra
Eres más de lo que puedo decir
Por eso callo
Arrojo la última piedra
Y con ella mi corazón va
Mi vida echa un ovillo en los cerros
Se levanta bañada en polvo
Manantial sin memoria
Para nombrarte no hacen
Falta palabras
Sólo callar
Y echar las riendas
Al presente que omito
Quedarse en plena lluvia
Aceptar el destino
Desde que me ubico en
Tus ojos
Y apagas la luz

martes, noviembre 25, 2008

PROEMIOS


ELEGÍA A UNA MUJER QUE DUERME


Mañana tendrás otro nombre
Pero igual
Te buscaré en los caminos
Y en los días
En las aves que cruzarán la tarde
Como cometas tristes
En los autobuses en donde
Una canción resuene
Tratando de matar cada presencia
En las calles sucias de llanto
Y en mi pecho vacío
Te buscaré a ciegas
Sin importar la avenida repleta
O las plazas bulliciosas del
Mediodía
Sin importar que vistas de azul
O que deambules con la cabeza
Cubierta de sombras
Reconoceré tu aspecto de ninfa
En el agua
Y atraeré tu silencio
Con el solo latir de mi corazón
En plena agonía
Te buscaré en lo profundo del mar
O en la soledad del pasado
En el cual aún navegan
Nuestros cuerpos huyendo del tedio
No puedo decirte más
Todo ha terminado en mis ojos
Tu piel etérea
Tus manos limpias
Tu bondad de santa egocéntrica
Tus labios envueltos por el viento
En mitad del otoño
Tu desnudez tibia mientras
La medianoche escurría mi último
Abrazo
Todo se ha quedado en el patio
En la alfombra que no nos pertenecía
En la silueta de algún desconocido
Que se aventuraba a llamarte
En este papel ridículo en donde garabateo
Una esperanza sin pena ni gloria
Sin entender que te llamarás diferente
A pesar del mundo
A pesar de mí




ELEGÍA PARA MI MUERTE


Lo único que quise fue
Escalar la muralla de tus brazos
Anegarme de tu voz
Como párvulo que omite desgracias
Detenerme en cada calle
Retomar tus ojos
Desde un comienzo
E ir buscando la manera de
Atraparte en una palabra
Hacerte raíz y símbolo
Caída de agua en donde salvar
Del ahogo a tanta memoria
Que nos precedía
Fui un infeliz vagabundo
Que yacía bajo árboles secos
O sobre campos de sombra
Fui asesino de mis días
Violento selenita de saco y silencio
Intenté sólo escribir
Sin intención de decirte nada
Pero súbitamente aparecía
Un atormentado adjetivo
Para representarme en primera
Persona
Yo no quería hablar más que
Del mar y la nostalgia de tanta ola
Hundida en la orilla
O de los pájaros que vi morir
En madrugadas agónicas de verano
Y esquinas absortas
Pero todo me devuelve a
Tus labios de musa dormida
A tu risa discreta
Cuando en las paredes
Te abrazaba buscando la muerte
Cada frase que escribo
Te repite como un eco de fuego
La noche es tu cuerpo que
Me arroja al vacío
Tempestad abrasadora
Tu desnudez que no tiene retorno
He intentado cruzarme de brazos
Y olvidar que a veces
Miro las cosas con gran ternura
Sin embargo
He continuado arrojándote eclipses
Frases repletas y galaxias
Galaxias y cometas tristes
Ríos de sonido en donde
Mi corazón
En completo silencio
Se aleja
Y se pierde



ELEGÍA PARA TUS MANOS


No importa el nombre que te llames
Ni el vestido azul que dejaste
Entre los libros
Importa la hora en que vienes
La tierra que tus pasos arrastran
La luna insistente
En el cielo de la noche
Noche de los días
Día de tus manos
La semilla que en tu rastro dejas

Importa el eco y la lluvia
La tempestad del silencio
Cuando amanece entre truenos
Y plazas relucientes
O el presente que acaba con todo
Mientras inmóvil dejas caer
Las horas como pájaros
Sobre mis sombra

Tampoco importa si apareces
Entre las olas
O convertida en mar invades
La bahía y mi memoria
Importa sólo que alguna vez
Fuiste presencia
La torre inmensa desde donde
Salté hacia esta calle
El lenguaje del cual nacen las
Palabras
Que te nombran
Y te olvidan


viernes, noviembre 14, 2008

PROEMIOS



I

Esperar tus manos
La tarde que me trae
Tu boca
Ese aroma a invierno
De tu cabello
En la almohada
Creer en ti
En la memoria
En todas las calles
Que anduvimos juntos
Dejar de verte
Cerrar los ojos
Decir palabras
Sin ganas
Palabras dulces
Palabras de hombre
Para mujer desnuda
Tocarte inmediatamente
Tocarte a medias
Con el filo de cada hora
Beber de ti
Vivir de ti
Como un mendigo
En plena lluvia
Repetir tu nombre
Olvidar el mundo
Olvidar las cuentas
La casa
El reloj
Hacerte mi sola presencia
El espejo que mira
La noche que pasa
El viento
Que entre las ramas
Te lleva sin prisa
Volverte sombra
De los pasos que ando
Del cuerpo que mato
De la nostalgia
Agolpada en el pecho
Y la lluvia
En cada calle
Haciéndose espina fragor
Montaña que cae
Árbol partido
Pasado que muere
Presente estancado
Y la calle vacía
El corazón sin nada
Sin voz
Sin más palabras
El corazón
El corazón
El corazón que canta


II

El río de la tarde
Se detiene en tu mirada
Se hace tierra
Raíz que de la lluvia bebe
Sobre empedrados
Abismos de luz
Pendientes de sombra

Estás desnuda
Y el invierno avanza
Se prende a tus senos
Como cualquier niño
Hambriento
Con años
Sin nada en los ojos

Caminas de memoria
El rastro de los días
Eres fuego que la playa roe
Viento que destruye sombras
Ave arrastrando insomnios

Si no fuera por ti
Estas palabras nada dirían
Y mi corazón caería
En acequias de llanto
Desvaríos de asfalto
O en cualquier rincón
Repleto de maleza y humo

Pero anochece porque estás cansada
Abres las manos arrojando
Universos de aire
Mundos dispersos
En donde siempre transitas tú
Torrente de luz
Cometa que estalla



III

A veces he pensado en escribir
Sólo tu nombre
Repetirlo en diferentes formas
Hasta olvidarlo por completo
Y he intentado llegar al fondo
Del mar buscando tu rastro
Imaginando que en algún lugar
Encontraría la sonrisa que usabas
Sin ninguna muestra de cordura

A veces me he quedado con
Las alas abiertas sobre el vacío
De tanta noche
Y he querido saltar con el cigarrillo
Encendiendo mis manos
Y me he dejado llevar por el viento
Hasta ahogarme de soledad
Como cualquier vagabundo

A veces he apagado la luz y
He cerrado las cortinas del sueño
Con la intención de atrapar
El recuerdo tuyo que flota entre
Estas sábanas
Y me he desnudado entre hojas
De libros amarillentos que olvidamos
En algún armario
Y te he nombrado por última vez
Antes de llegar al final de esta tarde

A veces he mirado en el espejo
El rostro que reconocí sólo en tus manos
Y he negado la posibilidad de Ser
Sin tu presencia en el cuerpo
Sin la fuerza de tus muslos
Batallando en contra de calles
Y más palabras

Y he caído desde todas partes
Sin piel ni memoria
Desnudo entre rastros y fango
Estéril de luz
Vacío de mar
Lentamente como cualquier hombre
Que no siente
La lluvia en la piel

jueves, noviembre 06, 2008

DÍA DE LOS MUERTOS



I

No hay tiempo para otra tarde
La piel los ojos y la voz
Se reducen al eco
De una hora sin rastro
Yergue la sangre
El corazón de tierra que se
Deshace en la lluvia
Las aves trasgreden el silencio
Como silogismos reducidos
A nada
El mar ruge
Las olas arrastran tus cuerpos
A esta orilla de gritos
No hay verbo que te devuelva
A tu imagen
Desnuda caminas la casa de
Tantas idas y vueltas
El jardín adormecido
Ahoga las hojas del día que muere
Abres los ojos y la luz te devuelve
Impávida al mismo camino…

No hay voz para otra palabra
Por eso callo
Para poder escucharte



II

Palabras cruzan las
Avenidas blancas de sol
El camino que se vuelve polvo
Frases que transitan
Sin decir nada
Pierden el sentido cual
Cometa que la tarde rompe
Pájaros viejos que en la arena
Desangran su
Último vuelo
Todo se hace momento caos
Tos insólita del destino
Que pasa
Cruza el tiempo en forma de nube
Cruzan las nubes en el tiempo
Que es lluvia
Mientras la tarde crece
Y mi nombre olvido


III

La soledad:
Idea que el cuerpo
Enlaza a su propia ausencia
Golpe de muerte en
Pleno transcurrir a ciegas
Graznido de luz
Torrente de llanto…
No hay motivos ni corbatas
Ni cigarrillos que a las tres de la mañana
No presenten la imagen de un rostro
Lívido…
Estar solo o simplemente
Vagar las calles sin rumbo
O dejarse en las calles buscando
Algún rincón en donde llenar
De memoria tanta hora disuelta
Recordar un nombre
Hablar de citas viajes que alguna
Vez se hicieron sin vida ni ganas
Llegar a la conclusión
De que quien fui es el muerto
Que cargo encima
Doblar la mandíbula y admitir
Que no siempre dije palabras
Y versos
Hubo épocas en que hablé sin
Necesidad de verbos u hojas
Instantes libres de calendarios
Y cualquier tipo de cronometría
Quizá por eso me cueste tanto
Recobrar la identidad de mi piel
Y tenga que andar buscando en
Cada espejo el rostro que hurtó
El mío
La tarde voluta
El mar hecho espuma



IV

Sobre ti
La luz posa su sombra
El triste ergo de los pájaros
En desorden
Las palabras
El viento que la lluvia deja
Los gritos de tanto árbol
Amontonándose en la calle
La soledad
Revive si tus ojos cierras
Caída
Fuego
Estropajo que la mirada enluta
Tu cuerpo transita entre la gente
Aparece con el sol
Desaparece
Como en un acto de magia
Tu cuerpo lluvia
Abismo que la noche
Inventa
Tu cuerpo de senos y carne
De mujer atrapada en
Papeles cartas
Caos de huesos
Mapa de tierra
Cementerio y tormenta
Tu cuerpo que vibra y canta
Y amanece como en despeñaderos
De sueño
Bajada sin rumbo
Universo sin rostro
Mar que lleva presencias y
Las devora
Haciéndose espuma
Y otra vez tu vientre incógnito
Tibio como la nuez en la tarde
Arrollador
Como autobús que cruza
La plaza
Tu cuerpo y tu vientre
Luz vacuidad de tiempo
Siniestro que absorbe bosques
Volcán germinando semillas
Signo y pensamiento impuro
Tus senos
Puerta que se abre
Ventana que encierra llanto
Cárcel perpetua
Raíz
Río en donde me dejo hundir
Tierra que multiplica insomnios
Espejo que renace tu voz
Aguacero
Madrugada en donde la
Muerte llega
Y lo desbarata todo


V

Hablabas de las horas que parecían lluvia
De los hombres que dejaron el tiempo
Enterrado entre piedras y charcos
Y dijiste que las palabras eran como islas
Adonde se tenía que huir para entender
La vida

Salías de la luz aterrada por la sombra que
Absorbía tus brazos
Cerrabas los ojos indiferente y sin la
Mínima idea del dolor que causaba
Tu ausencia

Para entrar en ti había que matar el cuerpo
Quedarse sin sangre sin voz ni memoria
Parecías la aurora que viene y se va y ya
No es la misma
Contigo los espejos eran sólo garabatos
Que incineraban fantasmas
Frases lanzadas al silencio como
Pájaros con hambre

Sin embargo era algo increíble
Verte con la ropa puesta
Después del mar y de tanta ola
Te ibas acercando hasta el centro del día
Desbaratando calles sugiriendo abismos

Caías desde cualquier ventana como
Ave que se pierde en la tarde
Y te quedabas prendida a mi memoria
Desnuda en tu soledad de mujer diurna
Desnuda y triste
Tendida en mis manos hasta desaparecer


VI

Herido de muerte
Entro al día
Sin entender palabras
palabras
palabras
me sumerjo en el silencio
y me quito los zapatos
resuelto y sin
memoria
me ato la sonrisa
y me miro en el espejo
y también me preparo
un café
o fumo con los ojos
llenos de lágrimas
el pasado entra
entra
se presenta con tu piel
con tus piernas
y tu vestido de lluvia
caigo en la nostalgia
de revolver cada presencia
y sólo me cubro
descubro
anulo mis sentidos
mi vida
me quedo sin nada
como un zombi
como un ave
que choca en los cristales
y muere
muere
muere
como un pájaro
entre tanta hora



VII


abro el libro que sólo
tú tocaste
con miedo
ensimismado
cual perro que presiente
la muerte
soy un ser frívolo
estúpido
en cada uno de mis
días
acaricio tus manos
que ya no están
te imagino en cada
página
desnuda
con hambre
con sueño
y te veo recorrer
el jardín
con pasos retraídos
el zaguán
fumando como
mujer sensible
te veo con tu sonrisa
y tu falda
dispersa
casi reina
ya sé que no es necesario
pero te invento en
la ducha
la cama
el minuto
que dura una llamada
escribiendo un mail
desanimada de decirme
algo
llamando a otros
pensando en otros
viviendo en otros
dejándome en mi asiento
en la mesa del bar
en la esquina del parque
como pobre hombre
como ave que cae
en la primera pedrada
con sed
con sangre
y sin ti





miércoles, octubre 29, 2008

PROEMIOS


HISTORIA DE LA TARDE EN FRAC


Te he visto en la última tarde conmigo:
La calle era un pájaro que roía
El silencio
Ranura insensible
En donde el cuerpo se reducía a su
Sola presencia
Había nubes en forma de almohada
Viejos rostros que enmudecían
Cuando los miraba en tus ojos
Esquinas y bares
Y entradas cerradas a cualquier pasado

Nos observaron cientos de
Anónimos andantes
Sin presentir que íbamos al
Funeral de nuestros abrazos
Sola en tu inmensidad de mujer fatal
Arremetías en contra del mundo
Con tu voz ahogada en un gesto
Tu cuerpo se mecía entre polvo
Y el claxon de algún carro a la deriva

Era la hora de acabar con el tiempo
El verano abría sus alas y se alejaba
Cual hombre que prefiere la lluvia
Sola te ibas con el libro debajo del brazo
Y la imagen de quien fui
Arrimado a tu costado

Nos vieron pasar por plazas vacías
Y avenidas relucientes
Caminar de un lado a otro
Sin decirnos nada
Nos vieron inofensivos y mediocres
Tú con tus senos y la poesía encima
Y la soledad de quien necesita calma
Yo con mi facha de muerto en ayunas
Y la torpeza de mis pasos entre tanta gente

Te he visto vestida de azul
Como ahogada en un mar sin fuerzas
Con la boca triste y el preludio
De un final insomne
Te he visto en el postrer instante
Sin pensar más que en la manera
De decir lo ya expuesto

No había fechas adicionales ni más palabras
Ni otro café para aplacar el vacío
En el estómago
Era el día de anochecer temprano
De retornar al marasmo del cuarto
A solas
Mientras el cigarrillo quemaba tu imagen
Y la nostalgia te decía adiós


……………………………………….


CANCIONES PARA TOREROS

I

Despojado de ti y de toda felicidad
Me despierto en esta cama del atardecer
Y abro los ojos creyendo Ser
Sin aceptar que solo tengo Soledad

Ella se ha desnudado en tu lugar
Y me ha llamado desde su frío rincón
Yo he sido capaz de abrirle mi corazón
Y me he quedado sin sangre ni verdad

Cuándo será que este día tendrá un fin
Miro el reloj y el tiempo tarda más que ayer;
Me desgarro y siento la vida partir…

Me gasto las palabras que tenía para ti;
Hundo mis manos en la vida que se fue
Y presiento la vida sin ti morir.



II

Decidido me desnudo de los pasos y los días,
Dejo la corbata, los rastros y el presente,
La triste ansiedad que dar un paso no se atreve,
Y deshojo en este papel mi piel, mi lenta vida.

Tiendo mi cuerpo en el lecho de las horas,
He envejecido con mis libros y tu nombre;
Quizá no me quede tiempo ni me sobre
La dulce verdad de tu vestido en mi sombra.

El tiempo cruza todos los zaguanes y la noche;
Bebe de la vida que se pierde entre el desvelo
Y la ciudad fría que ahora encandilado pierdo.

Muere el resto de la calle y muere la noche;
Las cosas mueren porque tú me faltas,
Y muero yo atado al vacío de tanta palabra.



III

Me busco en el espejo como un necio,
Y no reconozco la voz, los ojos de quien mira,
Sólo estoy seguro del marco, la ventana fría
Y el inicio de una muerte que ya presiento.

Me he perdido en la piel, los pasos absurdos;
No tengo más que horas, lamentos y palabras;
Si miro no es verdad que mi mano me alcanza;
Estoy solo del otro lado, voy sin rumbo.

La noche es como una herida que se abre;
No quiero paz, ni mar, ni un cuerpo tibio;
Quiero alcanzar sólo lo que ya no es mío.

Verme por última vez aunque sea tarde;
Hundirme en los ecos de cada día,
Y hacerme luz, oscuridad, rezago de vida.


martes, octubre 28, 2008

ELEGÍA CONTINUA


A
LÍA


No serás más que de mis manos
Y mi voz que te nombra
A pesar de que la tarde te mantenga
En una distancia de mar a ciegas
Y cruces la vida en un bus que
Te lleva de un lado a otro

A pesar de la ternura que me dicen
Tus ojos despiertos
Y la noche que te devuelve al
Presente en donde yo transito

A pesar del silencio que muchas veces
Nos aleja de esta calle por
Donde nos hallamos siempre
Y las cartas anacrónicas que nos
Dejamos en los recuerdos
Como si no hubiésemos revuelto
Tanta noche juntos

Yo sé que es tarde para
No abrir la puerta y desear verte
O cerrar los ojos sin rozar
Un poco de esa desnudez
Que compartías conmigo

Tú sabes que te recuerdo en el
Final y en cada una de las veces
Nada ha cambiado del tiempo
Que en el corazón retumba
Como salvavidas en cualquier fecha

A pesar de la soledad de los años
Y los kilómetros que no hemos
Transcurrido en un solo viaje
Y las aves que han cubierto de noche
Miles de días con el sol en lo alto

A pesar de los semáforos tristes
Y los libros con tu rastro
Y tu aroma a verano desvistiendo
Las horas

A pesar de tu almohada fría
De tu piel libre
Y de tu canto
Este que soy yo
Te abraza a sus brazos
Y te escribe palabras simples
En la pared…



………………………………..
De todo lo que soy
He sido en tu piel traslúcida
En las flores resecas
Que otro tuvo el tino de enviarte

No te reclamo por la memoria
O la nostalgia de ya no verte
Sólo te hablo con la corbata
Mal hecha
Con mi rostro aturdido por el
Viento y la lluvia

Te hablo con el sentimiento turbio
De tener las manos vacías
De ir por las calles y no hallarte
En las esquinas o mesas mutuas
O de vagar solo por librerías
Y desvanes que fueron nuestros

Te hablo con el corazón saturado
De pasos y cigarrillos
Con menos años y más pasado
Con la tentación de llamarte
De vez en cuando
Y escuchar tu voz repentina
Y pasmada

Te hablo con la lujuria que sólo
Tú sabías retener en tus muslos
Y sueños
Con toda la hipocresía de quien
Te engañó en pensamiento y acciones
Con todo el dolor de haber perdido
Tus métodos y silencios

Te hablo con el hígado hecho trizas
Con la embriaguez de mi postura
De anacoreta en penumbra
Con la soledad asfixiando mis manos
Para terminar con todo

Te hablo sencillamente
Como aceptando la distancia de tus
Manos en mis manos
Sin reclamar ni el mínimo pasado
Ni la más significativa muestra de
Afecto

Te hablo con mis ojos
Que vieron tu cuerpo despejando
La tarde
Con mis labios que se dejaron
Llevar por los tuyos
Con mi tristeza de siempre
Con mi inseguridad
Y mis hábitos de cenobita
Vencido

Te hablo para no hablarte
Para dejarte sola
En mí
Que permanezco en ti




martes, setiembre 30, 2008

CON TE PARTIRO

ESTE TIPO, BOCELLI ES DE LO MEJOR. ESTA CANCIÓN ES FABULOSA. QUÉ MÁS SE PUEDE PEDIR EN UNA NOCHE ASÍ. NOSTALGIA, TERNURA, AMOR. LA MÚSICA ES TAMBIÉN UNA FORMA DE POESÍA.

domingo, setiembre 28, 2008

PROEMIOS


POEMA DEL OLVIDO

Nada ha caído sobre el papel
Se parte el invierno en cada calle
La lluvia aún moja tu rostro
En alguna plaza que nos mantiene
Juntos

Montañas de luz
Calles viejas con olor a fango
Te detienes en el caos del mediodía
Y los pájaros arremeten en contra
Del tiempo

Es como si las palabras huyeran
Para encontrarte en el camino
Y descubrieran solamente
Algún cementerio en donde
Entregamos la vida

Quizá la poesía se quedó contigo
En la edad que nos unió
O en la soledad que reconocimos
Mientras mirábamos la noche

Era una ciudad triste a pesar
De las flores y tu presencia
Y mi corazón atado al puño tibio
De tu voz ahogada en mi boca

Todo se resume en una palabra
Quizá en ella todavía encontremos
Un poco de verdad a cuestas
El vuelo de las aves formando cometas

El ruido del agua chocando sobre
Un montón de piedras
Mi incapacidad para abrir los ojos
Y reconocerte entre tanta sombra

Entonces era tan fácil hacer un poema
Sacar palabras como mago después de
Cada día
Repetir tu nombre hasta caer de sueño
Imaginarte lejos y
Verte cerca

Ser malo delicado o sólo
Andar desenmascarando horas
Hasta llegar a esta noche
Y entender que el tacto dejó tu piel
Hasta volverte insensible…
Pues ya no sientes mis manos



CUERPO A CUESTAS

Asfixia la soledad mi corazón de ciego
Mis manos la atraen y enseguida
Siento como la sangre se emociona
Y enardece la visión de tanta ola

Crecen tristes los árboles en algún lugar
Pero aquí ha dejado de llover
Aun cuando sea el invierno
Quien se desnuda en la noche

Todo retorna a su origen de agua
En silencio los muertos del pasado
Avanzan proyectando innumerables
Sombras que caen como pájaros sangrientos

Renazco en las entrañas de tu silencio
Atado el cuerpo a la pared
Me desvisto de sueños y abismos
Y voy tras la cortina
Con los pasos maltrechos y las horas

Sé que mi vida no ha tenido espejo
Y cruzo las manos para morir sin prisa
Afuera un montón de rastros
Recrean mi rostro adolorido después
De esperar y no hallar nada

Afuera el tiempo gira en círculos
Haciendo de la soledad un sinfín de ecos
Renace entonces la palabra y el punto
El adiós pausado diluyéndose
En tus ojos de tierra

Todo se reduce a un mísero movimiento
La sed de tomar tu cuerpo por los bordes
Esa sensación inútil de presagiar presencias
Las imágenes que aparecen y son nada
La vida que se marcha y también es nada


sábado, setiembre 20, 2008

PROEMIOS


El mar y su canto de espuma
Ese rugido insólito de las olas
Absorbiendo piedras y horas
Las aves que aletean ausencia
Y merodean sobre la calidez
De tu cuerpo anegado de sueños
Todo se va volviendo pasado
La ciudad que desfallece al final
De tu boca
El horrendo patio vacío
Tendido bajo la bruma
Como fantasma triste
La corbata doblada a medias
Aguardando sobre algún libro
En donde también posaste tus ojos





ya he debido omitir tu nombre
dejar de repetirte en bares
y salones tristes
sin embargo
yo no olvido
que envuelto en tus labios
aprendí a hablar
a deambular por la oscuridad
de los días
cuando tu piel se volvía
ausencia
y me descubría en alguna mañana
tan solo
como cualquier hombre
sin nombre en su desesperanza
sin voz
en donde poderme ahogar





Remota en la memoria, tu piel
Transita ofuscada detrás de mis días;
Se abalanza sobre las calles que nunca
Andamos y recoge los gemidos de
Tanta noche perdida en la lluvia.

Muros de bruma se levantaban a mi
Alrededor, entonces.
Yo era un tipo convexo en la mañana
Y sólo tuyo a partir del mediodía.
No quiero que se entienda la soledad
Que trato de hurgar y ahuyentar.

Ahora, si realmente estás circulando
Libre de pasados inútiles, te exijo
Una sola quimera,
Un solo grito de lealtad y odio,
Un último intento para soltar mi voz
Y despegar desde tus oídos.

No hace falta cubrir de luz nuestra
Presencia, basta con abrir la noche
Y sentir que entras con tus pies
Y tus manos.
Tú, efervescente en tu túnica de sueño,
Pensando u olvidando para no entender.




sábado, agosto 23, 2008

ÚLTIMO RECURSO

I


Tengo momentos de ti
Lentas imágenes en cámaralenta
Tu cuerpo ensimismado
Entre la bruma y mi boca
Tu cuerpo sangrante
Tu cuerpo frenesí o puerto
Yo sé que si no hubieses marchado
A otras calles e infalibles amantes
Esto que eres
Nada significaría
Ahora serás inmortal
Como tu sexo y la lluvia
Ya no te veré envejecer
Ni enojarte por cualquier cosa
Serás simplemente
Tú con tus veintitantos años
Y tu odio por los cigarrillos
Y tus ojos que me hacían temer
Un adiós sin fechas
La tristeza de verte a diario
De no entender quién eras
Aun cuando buscara en tu historia
Ya no te escribiré tontos poemas
Ni te los leeré embriagado y con celos
Sólo me pasaré el tiempo
Como quien cruza las calles
Con algo de inquietud por saber
Cómo te recordaré al llegar
A una nueva esquina




II


Eres espejo de cada día
En ti la calle se resume
A tu sola presencia
Es como si no importara
Ni la lluvia o la bruma
Manchando nuestra ventana
La tarde se arrastra alrededor
Tú continúas como recién nacida
Con tus ojos absorbiendo
El mundo
Yo me pregunto
Si alguna vez
Abarcar podré tu presencia
En mis dedos
Pero luego callo
Escondo las manos
Como quien teme perderte
Inútil me voy
Con tu boca marcada en la mía
Con toda la oscuridad a cuestas
Sin poder recordar tu pretérita
Sonrisa
O tus ojos cubriendo el silencio
O la forma tuya de decir palabras
Sin manchar las horas



III


Las palabras a veces
Se reducen a repetir
Tus nombres
Como único significado
Las dejo sueltas por el zaguán
Y sobre las cosas
En papeles tristes
Que yacen en blanco
Como algún recuerdo
Que ha dejado de ser presencia
Entonces me tomo un café
O solo enciendo un cigarrillo
Me tiendo a esperar los días
Con la barba de meses
Y mi máscara de buen hombre
Que sufre un nuevo abandono
O que espera la lluvia
Para limpiar tus huellas
De esta cama
Y de mi piel



IV


Las palabras se desnudan
En tus manos
Se hacen eco voz
Fuego que la tarde ahuyenta
Recorro los restos de tus nombres
Las hebras insomnes de tu piel
Y de tus pasos
No me alcanza el silencio
Para recordarte entera
Todo lo que tengo no es
Suficiente
Para dejarte
En la memoria

Por eso huyo de esta noche
Sin nada a cuestas
Inverosímil me dejo llevar
Descalzo
A cualquier parte
Ya no importa esta muerte
Sin ti revolviendo los días
Sin tu boca lenta acaecida
Entre tanta calle
Todo se vuelve vacío
Torrente que desangra mi pecho
Hasta sentir
Tan sólo tristeza




V



Cómo huir de la oscuridad
De las sombras que arrastran mi cuerpo
Si miro alrededor
Y no hay nadie
Nadie es decir Nada
Sentir el vacío desnudando cada hora
Ver la corbata resuelta a su
Inmovilidad
Sobre el sofá
O en mitad de la cama
Tratar de resucitar tus manos
Y entender que la realidad
No admite más que momentos
Instantes tenues que como llegan
Se van
Engrandeciendo la ausencia



domingo, julio 27, 2008

IDEARIO DE LA INDECENCIA


À toi, toujours


I

Qué será de ti mi amor
Cuando no te ladren
Ni los perros flacos
De tu calle
Y tengas hambre

Quién le dará de beber
A tu corazón
Este amor
Que sólo yo te doy
Sin pedir nada

Quién te cocinará en
Silencio
Para que duermas bien
Y sueñes con ángeles
Y otros hombres

Qué será de ti mi amor
Cuando pases los treinta
Y no tengas ni un mugroso
Recuerdo
Para enternecer tus
Días

Quién te cubrirá de flores
Y golpes de pasión
Entre cervezas heladas
Y cigarrillos humeantes

Quién querrá ser tú
Y sacarte la ropa
Y verte cada mañana
Con tus ojeras
Y tu rostro de niña
Mala

Qué será de ti mi amor
Si después de mí
No hay nadie
Aunque me muelas
A taconazos
Y no quieras perdonar
Esta última infidelidad
Antes de irme

Qué será de ti mi amor
Si ahora que me voy
Tú andas cos cinco kilos
Demás
Y las cremas ya no te
Funcionan como antes





II

la noche hinchada de horas
sacude sus brazos
y me llena de golpes
arrastrándome por gritos
y espinas

en donde estoy
todo pierde sentido
la muerte
la vida con su plof plof
edípico
la virginidad atrayente de
las novias desposeídas
de pasión

no quiero abrir otra vez
los ojos
y resucitar mis años
los fantasmas que cruzan
cada madrugada
garabateando insomnios
males brutales
que adormecen lentamente
las ansias de andar desnudo
la loca idea de embriagarme
hacia la nada

ese callejón que se cierra
apenas doy un paso

en donde estoy el mundo
se desmorona
y en silencio las olas
corroen
mastican cada segundo
sangrientas
enormes con sus senos
abiertos
y su sexo sombrío
y su hálito a podredumbre




III

eras triste matando las horas
cual palabra mal dicha
y amontonada en basurales
o cantinas de mala muerte

eras la calle por donde anduve
sin abrir los ojos
Barbie decadente entre tus cinco
kilos demás
y tus senos que horadaban
insomnios

contigo la eternidad incendiaba
el crepúsculo
y dormida eras
como el más increíble
recuerdo
al borde de algún abismo

te entregabas como ninfómana
en pena
limpia tranquila
a pesar de tu cruz
y el destierro de tanta hora
podrida al final del sueño

luego te dejabas en libertad
y morías cada tarde
desnuda y sola
enmarañada entre inviernos
acaecidos en tu vientre tibio

quién iba a pensar
que te irías deshojando flores
maldiciendo el silencio
que lo corroe todo

ahora tu rastro se pierde
ya no hay nada más allá
de tus pasos

sólo el remedo de un hombre
se tambalea
perdido en ausencias
repitiendo tu rostro a pesar
de esta lluvia que mata
las flores
y no deja oír tu voz



ESTRUENDO

I
Arremete la mar del día
Sobre las veredas y los hombres
Desnuda silencios voces
La mañana…

No queda más que seguir andando
Pariendo soñando
Detrás de los árboles se esconde
Una multitud de palabras

Yo trato de decir algo
Pero no me sale nada
Siento el ahogo de los días
El basto cielo que cubre
Las cosas

Avanzo por un mundo que no conozco
Cada calle es la primera que ando
La última que observo:
Alrededor se alzan viejos hombres
Con su barba y tanto de tristeza...

Que es una lástima sentir la vida
Dejarla no esperar a que
Se acabe el instante

Es doloroso saber que se va
A cualquier parte
Y que siempre se retorna
A la misma habitación
En penumbra
Al mismo río sucio del
Primer nacimiento

No importan las horas
Las cosas los párvulos que
Tomaron mis manos
O violaron el preludio de una
Amistad sin pena ni gloria

No importa la noche en la cual
Me oprimo y desvisto mis ojos
Sé que jamás volveré a mis palabras
Que a nadie le importa si salgo
A las calles
O me tiendo a esperar la muerte



II

La muerte debería ser como
Recitarte de memoria
Tu rostro ensimismado por la tarde
El mar rugiendo en contra nuestra
Las aves
Lanzando a lo lejos
Su maldición entre cada aletazo

CAÍDA LIBRE


Si nada más me importa
Y olvidado he tus manos
Y los días que manchamos
En nuestras esperas

Si es igual la vida
Y no hacen falta flores
O palabras tristes
Para desnudar nuestros abrazos...

Entonces yo no entiendo
La soledad en primera persona
O tus labios resecos en el
Espejo de tanto rastro mutuo

Quizá sea la lluvia o esta música
Que nos provoca lentitud para irnos
Y dejarnos como desconocidos
En plena acera

Quizá el silencio haya aguardado
Este instante
Para mostrarnos la calamidad
De toda ausencia

Pues la verdad es que nos hiere
La sola idea de dejarnos en otra calle
Seguramente con el tiempo
Las heridas se cubrirán de fango
Mas siempre se podrán mostrar
Las heridas y las sombras

Entonces ambos admitiremos
El naufragio en la distancia
Quizá intentaremos recobrar el rumbo

Pero tú sabes que el camino se pierde
Apenas se lo ha dejado al amparo
Del viento ….